miércoles, 27 de abril de 2011

Mediterranean Training Camp SS'11

Los más cercanos ya sabéis que, si estos días tengo que escribir algo, esto no sería muy animado. Es lo que tiene dar un paso atrás con la lesión cuando parecía que ya iba para delante. Pero como no me gustan los blogs lacrimógenos, voy a escribir esta entrada como si la escribiera el domingo al mediodía. Y es que era domingo cuando poníamos punto final a lo que ha sido una nueva edición de nuestro tradicional Mediterranean Training Camp de Benicassim ;-). Y estas semanas de machaque y disfrute son una gozada por varias razones:

- Porque sin darte cuenta entrenas 19 horas dándote tiempo además a dormir, leer, comer, volver a dormir ;-), turistear, salir a cenar,… sí, las piernas duelen… mucho… pero la sensación de cansancio general es la mitad que entrenando 12h en una semana de curro normal


Azul - SW; Amarillo - BK; Verde - RN; Rojo - Gim/Otros



- Porque puedes salir 3 días en bici haciendo cosas totalmente diferentes: lo mismo llano-toboganeas 2h30 haciendo unas series de 30’ que te dejan calentito, como que ruedas 4h30’ huyendo de las nubes pedaleando en dirección a los claros cruzando bellos pueblos (que suelen estar en colinitas con sus 4-5km de subida) o al día siguiente completas 100km costeando que, si bien hay tramos pestosos de carriles-bici urbanos, con cruces y estrecheces, se compensa con caminos rodeados de naranjos con el mar a un lado y la montaña al otro. Y eso, completando con las 2h30’ del lunes después de nadar en ayunas por nuestro carril-bici tricantino, suman 13h para 361km de pedaleo… ahí es ná. Y eso por no hablar de que entre el sábado y domingo anterior ya sumábamos casi 200km con sus series y todo… vamos, que el dolor de piernas no es casualidad…




- Porque puedes correr por una vía verde de 5,5 km de longitud y bastante llanita sobre tierra (tierra roja que te pone perdido, eso sí) a la orilla del mar con todos sus kms bien marcaditos. De esto no he podido disfrutar mucho, ya sabéis, pero al menos pude volver a correr, alternando correr y andar durante 1h10’ el martes y 46’ el jueves, volviéndome a sentir triatleta de nuevo.



- Porque puedes elegir entre una pequeña playita familiar cerca de casa o playas inmensas prácticamente vacías y bien cuidadas. Y, elijas la que elijas, se nada de lujo, con agua a buena temperatura (no muy fría en primavera y no muy caliente en verano), buena visibilidad, boyas de orientación y kilómetros para recorrer.

- Porque el clima es magnífico (y eso que esta Semana Santa no ha sido muy favorable, pero al menos nosotros hemos podido salir en bici y hasta nadar en el mar sin excesivo problema) y el paisaje espectacular… y eso por no hablar del olor a monte…. mmmm

- Porque en una semanita de nada, te pones fuerte, tanto física como mentalmente, y eso, al menos un par de veces al año, hay que aprovecharlo…

miércoles, 13 de abril de 2011

El día

En estas 6 temporadas que llevo de triatlón siempre he tenido, por decirlo de alguna manera, un objetivo global. Mis intenciones siempre han sido hacer una buena temporada (con la definición de "buena" diferente cada temporada, claro), que incluía un montón de competiciones de diversa índole, pero que comenzaba en febrero/marzo y terminaba en septiembre/octubre. Lógicamente consideraba unas competiciones más importantes que otras, más o menos con esta caracterización:


- Tipo A: objetivos principales. No más de 2 por temporada suficientemente espaciadas en los que intentaré estar a tope y, por lo tanto, ajustaba la planificación para ello, con sus cargas, su descarga y su supercompensación. Uno de ellos casi siempre ha sido el Cpto. de España de Triatlón y el otro un poco más variable

- Tipo B: competiciones en las que lo quieres hacer bien, pero tampoco son vitales. Se calcula la descarga necesaria para estar fuerte pero descansada en esa competición. No serían más de 5 o 6 por temporada.

- Tipo C: competiciones tipo entrenamiento, en los que apenas hay descarga y se meten casi como un entreno de calidad más (con ciertas precauciones para no sobrecargar, pero poco más).



Así, si había una época un poco más floja, pues ya vendría otra mejor…. Tienes tus altibajos, pero al final el resultado es la suma de esos 6-7 meses que, además, solía ser una suma positiva con creces. Pero este año no. Este año hay un día en luces de neón sobre mi cabeza. El 24 de julio brilla y parpadea constantemente. Además, a estas alturas, está a punto de iniciarse un marcador igualmente luminoso que arrancará con la leyenda: “faltan 3 meses y bajando”.

Y, cuando pasa eso, pues te preocupa que a falta de tan poco tiempo, lleves 2 meses sin correr. Te preocupa porque, aunque parece que poco a poco voy saliendo de este pozo (ya he empezado a trotar algunos minutillos y no hay dolor, aunque sigo notando que algo no está bien), 42km son muchos kms y ahora no puedo ni correr la décima parte. Te preocupa que no hayas podido entrenar toda la bici que te gustaría y te preocupa doblemente cuando ves a la gente que van como motos y tú te notas tan verde aún. Te preocupa que entre unas cosas y otras, no consigues enlazar dos semanas buenas seguidas. El agua no me preocupa… debe ser lo único.



Y no me preocupa que no pueda terminar el IM, no. Eso, si la lesión no lo impide que contra eso no se puede luchar, tengo claro que no será problema. El problema es que yo no quiero terminar, sino terminar bien. Y terminar bien no significa hacer menos de X tiempo (un 11:XX con XX lo más bajo posible estaría bien, pero en el triatlón nunca me he fijado en los tiempos y no voy a ponerme marquista ahora… si fuera así, me hubiera ido a Roth en vez de a Frankfurt ;-)), o hacer entre los X primeros puestos de mi GE (que X<15 sería una buena cosa, claro está). Terminar bien significa poder tener sensación de apretar en la bici sin pasar momentos muy malos y, sobretodo, poder hacer el maratón corriendo (salvo en algún avituallamiento, se entiende), de manera que cruce esa meta con sabor a competición, no a supervivencia. Luego el día D puede pasar lo que sea, porque hay mil cosas imprevisibles que pueden hacer que te arrastres a 4 patas, pero quiero estar preparada para la otra opción


(NOTA: a veces he dicho algo así y hay gente que le ha parecido mal, así que aclaro que no me parece mal, ni despreciable, ni no meritorio el que vea el IM como una supervivencia... solo digo que a mi, hoy por hoy, me gusta planteármelo como una competición y que, cuando no pueda tomármelo así, pues ya veríamos, aunque imagino que me dedicaré a otras cosas que requieran menos dedicación, pero que cada uno se lo tome como quiera, que a mí me parece bien aunque yo no lo haga).



Ibiza es buen ejemplo… Jaime siempre me dice que me fui tocando el pinrelillo en la bici (aunque hice el primer parcial de todas las chicas quitando a las dos guiris que quedaron 1ª y 2ª, paraditas en los arbustines incluidas jeje) y, aunque no pude dar todo lo que hubiera podido dar si no hubiéramos tenido La Tormenta Perfecta sobre nuestras cabezas, sí que tuve sentimiento de competición en todo momento… incluso en mi paseo al WC del bar en la carrera a pie jeje. Y así quiero que sea el IM. Y quiero que sea así porque sé que es el primero, pero no sé si habrá un segundo ni cuándo, así que no hay que desaprovechar oportunidades… Así que sí, estoy preocupada.



Es verdad que no estamos tan mal, y las carreras (la entera de Sergio y la 2/3 mía, claro) que hicimos en el ICAN dan buena muestra de ello. El test de Morcuera de Sergio el sábado pasado (antes de piñarse) también fue espectacular, subiendo su FTP en más de 20w (hizo la subida en 35’ a 272w, a 4,25w/kg que ya está bien). Supongo que tenemos alguna renta de la que tirar, pero hoy por hoy la preparación no está saliendo como nos gustaría y eso nos inquieta. Tanto que, como después de Semana Santa la cosa no empiece a remontar, nos tendremos que plantear alguna cosa…

viernes, 8 de abril de 2011

Alter-Geando

Bueno, como lo prometido es deuda, ahí va el vídeo de mi prueba de la Alter-G de Luna Solutions en mi visita a Tamalpais en Marbella (que vaya local bonito que tienen allí, lleno de juguetitos la mar de apetitosos… PTs, ropita Skins, ruedacas Enve,… uffff):



Básicamente, la máquina lo que hace es calcular tu peso e introduce la presión necesaria para simular que pesas el porcentaje de tu peso que le indiques (desde el 100% hasta creo que el 20%). Para ello, te pones unos pantaloncitos de neopreno con una funda que se une con una cremallera a la máquina, de modo que tú vas comodísimo y totalmente centrado en el tapiz, de modo que los torpes como yo no tenemos posibilidad de caernos.


Así vas controlando el porcentaje del peso y la velocidad a la que quieres correr. Por ejemplo, yo estuve moviéndome entre el 85% y el 90% de mi peso a la velocidad de 4:30/km en la que iba tan ricamente (aunque cansar, cansaba, claro), con muy poco impacto y sin peligro para mi lesión durante 25’.


Las aplicaciones que se me ocurren son varias, desde rehabilitación de gente que ha sufrido accidentes u operaciones, hasta estimulación motriz en ancianos o, para deportistas, tanto la posibilidad de entrenar con menos impacto si estás lesionado o la posibilidad de entrenar a unos ritmos que en la calle quizá no puedes hacer, lo que ejerce un estímulo a nivel neuromuscular diferente y te permite un trabajo muy bueno de movilidad a nivel articular. De momento (aunque seguro que poco a poco va habiendo más) solo hay dos máquinas de uso público en España (aunque hay varias de uso privado): una en Tamalpais en Marbella y otra en Madrid, en el Sports Club Norte Real, en San Sebastian de los Reyes (Madrid) así que, si os apetece probarla, pues ya sabéis :-).

martes, 5 de abril de 2011

ICAN Marbella

Creo que no hay situación peor para un triatleta durante una competición que el estar obligado a retirarse, incluso cuando tienes claro que es lo que vas a hacer. Y esa es la situación que viví el domingo en el ICAN Marbella, ya que aunque estuve esperanzada casi hasta el último momento, mi cintilla aún está en proceso de recuperación y haber corrido 21km hubiera sido una locura, además de poner en riesgo los grandes objetivos de la temporada. Pero, aún con eso, disfruté y mucho, gracias a la buena gente que forma esta organización y al cariño con el que nos trataron en el Hotel Fuerte Miramar Marbella (y eso por no hablar de la comida… ese buffet de desayuno era todo un paraíso terrenal).


Llegamos el viernes, a toda prisa, que a las 20h había una charla sobre distintos aspectos de la LD. Pero no, no iba a atender a la charla… mi lugar estaba en la mesa, junto a 3 triatletas de lo más grande que hay en este país: Nico Ward, Ciro Tobar y Eneko Llanos, con Jaime moderando. Ahí es ná… A pesar de sentirme tan tan pequeñita a su lado, disfruté muchísimo de la experiencia… y es que rajo bastante más que pedaleo jeje. Espero que los que estuvieron disfrutaran también


Foto: Ican

Sábado disfrutando del día, del montaje de la prueba, de la compañía y del mar, nadando un poquito para comprobar que el agua no estaba tan fría. Domingo, 4:30 de la mañana en pie, desayuno de lujo, bus y a boxes. Todo perfectamente montado y controlado. Calentamiento y a cámara de llamadas. A los élite nos colocan en una línea 5m antes que el resto… ¡y maldita la hora!!. Cuando suena la bocina, 400 búfalos me arrollan como si fuera un cervatillo. Me pillan en medio de un delfín y no puedo salir del agua… un poco más y me ahogo. Consigo ponerme de pie y esperar un poco a que pase el mogollón y ya echarme a nadar entre puñetazos y patadas. ¡Qué angustia!!. Poco a poco voy adelantando gente y ya me coloco en mi lugar. Lo de que casi todos nos saltamos la 2ª boya amarilla ya lo sabéis…. Yo me di cuenta cuando vi que casi estábamos en la naranja y me faltaba una amarilla para las cuentas… pero por delante todos y por detrás todos los que vi, hicieron lo mismo, así que poco más se puede hacer en ese momento… Salgo del agua pocos segundos detrás de Sergio (con lo que me llora en la piscina y vaya tela cómo está nadando!!), nos juntamos en la T1 le animo, me anima, me cargo el neopreno al quitármelo (glups) y oigo por megafonía que soy la primera chica en salir del agua… ¡¡genial!!! (aunque no sé por qué no aparecen mis parciales en las clasificaciones aunque me haya retirado). Cojo la bici y a por ello!! La idea era hacer un test, darlo todo en la bici, y así lo hice… claro que rodar por la AP-7 ayudaba y mucho!. La verdad es que acabé tostada, pero creo que si hubiera dejado de pedalear en las bajadas en vez de darle caña todo el tiempo y controlándome un poco en el llano, habría podido correr decentemente, así que estoy deseando que llegue el próximo medio IM para probar :-).



Fotos: SportCam

Para los que os gusten los números, me salieron los 90km en 2h54, a 31km/h de media, a 170w medios (87.2% de FTP) (174w si descontamos los tramos de enlace con la AP-7, que a la vuelta resbalaban telita con la lluvia y, tras dos buenos derrapes, decidí que mejor ir a 2 por hora…). Buenas sensaciones a pesar de que era duro duro, con largos y continuos toboganes, y, lo mejor de todo, ¡¡me bajé a correr 2ª!! (me adelantó en la bici la alemana que ganó como un obús… también en los primeros kms me adelantó María Bravo, pero luego la pasé y le saqué unos segundillos en T2).

Y, el final de la historia, pues ya lo sabéis. 3kms medio caminando medio trotando para ver un poquito del bonito circuito que nos habían preparado y retirada, con molestias además. Pero bueno, ha sido una gran experiencia, un gran entreno y creo que un buen test.




Y el lunes, la guindita: visita a Tamalpais para probar la Alter-G, en la que pude correr durante 25’ a 4:30 como una reina simulando que pesaba menos de 50kg!!!, ¡¡vaya sensación!!!. Cuando tenga el vídeo, lo posteo y os comento más impresiones.




Y, poco después, unos minutos en la playa como despedida y a casita… a pensar en la siguiente ahora que voy viendo la luz al final del túnel…